CLIMBIWIND (VÍA TINO AL PÁJARO)

En el reproductor MP3, suena la BSO de Regreso al Futuro, mientras en mi mente se agolpan los recuerdos de mi última visita al Pájaro, con Michel e Icoba.


Hoy sábado, vuelvo a probarme en el mismo risco, pero esta vez con Uge y en la cara Oeste, donde nos planteamos la poco conocida y nada repetida vía Pulga-Enanos.

Son las 09:35 cuando paro ha echar gasolina y veo que tengo un mensaje de Uge. En el me advirtie del fuerte viento en Manzanares y de la posibilidad de que descartásemos escalar. 40minutos después y a pesar del fuerte viento que azota en Canto Cochino, estamos de camino a la Oeste del pájaro.


Cuanto más nos acercamos, menos posibilidades veo de que podamos meternos en la fría y ventosa cara.


El viento, literalmente, nos tira al suelo.
Nunca había sentido tal velocidad y suponemos que este, debe superar los 100kms/h.

Es demasiado temerario. Salgamos de aquí.

Uge me propone pasar a la otra cara del Pájaro, por la canal Norte. Accedo sin discusión pero con cierto recelo por el viento que debía correr por dicha canal.
No me equivoco.


Allí, el viento sube por el estrecho hueco y te levanta como si fueras una frágil y ligera cometa.
Un par de veces me veo con los pies en el aire por este motivo.

Jueeeeerrr...

Veo a Uge ya en la parte de arriba que baja para echarme una mano por mi pesada mochila, pero de repente el viento azota de nuevo fuertemente y le tira para atrás dejándole sentado.
Yo, espero agarrado a la fría roca hasta que pasa un poco.

Por fin, después de unos cuantos pasos húmedos más, estamos en el salón del Pájaro y luego a la otra cara, donde por fin recibimos de nuevo al sol.


Decidimos bajar por la canal que bordea la cara Este mientas vamos viendo GCDAYH (grandes clásicas de ayer y hoy) que nos invitan a subir por sus verdes placas y canalizos.


No hay nadie en todo el Pájaro,... sólo un par de colgaos.

Un par de enrisques más tarde, llegamos a la Sur, donde comemos algo y nos planteamos darle a alguna vía por esa cara, ya que a pesar del brutal viento, el sol brilla y calienta nuestras espaldas.

La decisión se toma en cuatro frases.

Uge: Que te parece la vía Tino?
Yo: Que grado es?
Uge: 6a...creo
Yo: Vale.


Es la 13:00 cuando comenzamos a trepar por la vía.

Por decisión unánime, Uge comienza el primer largo, que consta de un canalizo seguido de una incomoda fisura ancha en la que hay que cerrojear en abrasiva roca. 6a+.


Hace reunión en la repisa que hay antes de árbol verde.
Desde ahí, me recomienda que me suba los guantes puestos para no desollarme los nudillos, pienso en el esparadrapo que tengo en la mochila, pero desisto por la lentitud de andar poniéndomelo y pensar que Uge se helaría de frío allí esperando, así que subo a pelo.

Efectivamente, los 15 metros finales son de cerrojeos que hacen que me machaque los nudillos, pero lo hago aunque sufro/disfruto.


El siguiente largo no lo tenemos claro, pero Uge me aconseja que piense de forma clásica y busque la debilidad de la pared, así lo hago pero eso me lleva al tercer largo de la Directísima Bobah, con una placa de 6b, que luego en casa compruebo, pero no debe salir más de 6a+.
El viento, arreciando, me obliga a pegarme a la pared continuamente, apretar los dientes para que no me despegue de ella, mientras me zarandea con furia.


Jueeeer y en Patagonia la peña trepa con vientos de más 100kms/h?

Los 30m metros del largo se me están haciendo eternos, ya que sólo me puedo mover, con cierta seguridad, cuando me deja Eolo.

Parece que para...¡Ahora!


Después de unos interminables minutos, por fin salgo al mostrador final y luego, a la segura reunión.
Justo, el viento, se para en ese momento.

Será posible?

Uge sube, comentándome que es posible que la vía fuese por el diedro de la derecha donde además está clavado. Luego, comprobaríamos que efectivamente es así y no da más de V+.


Seguido a este viene el largo más difícil de la vía, donde Uge demuestra sus dotes clasicorras de artificial, sufriendo, a pesar de su experiencia, ya que el viento le golpea continuamente en una espectacular travesía que luego me tocaba desequipar a mi.


Este largo, si te lo das en libre, sale de 7a+, por lo que ni me lo planteo, ya que entre el viento y los cómodos gatos Ascent que llevo, no tengo ninguna posibilidad de sacarlo y muchas de pegarme un revolcón por la travesía.

Acero como un condenado, aunque no es fácil a pesar de que Uge, sabiamente, me ha dejado largas cintas para agarrarme.


Dos rápeles después, estamos en la base de la pared, contentos por la fantástica vía que habíamos hecho, siendo para los dos, mucho más bonita que la Sur Clásica.

Curiosamente comprobamos, que el viento ya ha parado y ahora hace hasta calor. Es como si hubiéramos cerrado la puerta que hacía corriente.

Después, de unas fotos al Pájaro, por parte de Uge, haciendo el cabra por el Platillo,...


...bajamos al bar Jara, donde cae otra clásica. Cerveza+te.