30 de marzo de 2009

MOCHILA QUECHUA FORCLAZ 50 SYMBIUM (MATERIAL)

Hará unos dos años que me compré esta mochila y la he dado bien de caña hasta que la semana pasada me petó por un sitio, que en mi opinión nunca debería hacerlo una mochila.
El fabricante asegura en su web, que tiene 5 años de garantía, por lo que probaré a ver que me cuenta.

Bien es cierto que tampoco le podía pedir mucho, ya que es de sobra sabido que la marca en cuestión, no destaca por la calidad y duración de sus productos, aunque de un tiempo a esta parte, poco a poco, va mejorando y también subiendo sus precios.

Esta en concreto me costó unos 75€.

Os hablo de la mochila FORCLAZ 50 SYMBIUM


Se trata de una mochila de 50l, con cremallera frontal "estanca" de arriba a bajo (de doble dirección) para tener una acceso directo sin revolver todo y además con la posibilidad de llenarla/ordenarla más fácilmente.

Su espalda es cómoda (al menos para mi) y te deja bastante movilidad cuando caminas o trepas.


Esta espalda es justa, en altura, para no entorpecerte mirar para arriba cuando vas sin casco. Si vas con él puesto o a tope de carga, sí que molesta, pero menos que otras que he usado, por llevar la seta hacia adelante.

Primeras impresiones:


El cinturón (A) es amplio y mullido...quizás en exceso. Lleva un bolsillo (B) con cremallera demasiado voluminoso, en el que puede entrar la típica cámara digital compacta.
Yo lo uso para esas cosas que nunca sabes donde guardas (llaves, gomas de la esterilla, etc) ya que mi hija no entra ahí ;)

Su peso es de 2,2kg (curiosamente lo que indica el fabricante) lo cual es bastante para una mochila de 50l.

Lleva un sistema en las cintas (C) que unen las hombreras a la parte baja de la mochila, con unos elásticos que hacen que la carga rebote un poco al caminar.
En principio la idea es buena ya que así amortigua el movimiento del peso al caminar, pero al final resulta contraproducente ya que en movimiento de trepada, te podría desestabilizar.

El cubre mochilas que tiene (D), está situado, su bolsillo, en la zona delantera de la parte de abajo, lo que hace que reste espacio en el interior, ya de por sí más estrecho de lo habitual.

El sistema de cierre de la cintura (E), me parece genial, ya que el ajuste es hacia el interior, lo que consigue que sea más sencillo de apretar que los clásico hacia atrás y tambien de aflojar.
Quizás un más largo recorrido de la cinta, ayudaría a un mejor ajuste ya que se queda corto cuando vas ligero de ropa.

Puntos débiles:
Lo primero que me petó a los pocos meses de usarla fue el cordón de cierre de la parte de arriba, que solucioné usando unos cordones de goma elástica anudados a cada lado, para evitar que se fuera, tras hacer un pequeño corte en el lado de la cremallera.


Lo segundo (recientemente) es la costura de la cinta de aproximación de carga (F), que está en la parte de arriba de la hombrera.


En mi opinión este punto es imperdonable que se descosa.

Otro punto débil es el olor.
Con ninguna mochila me había pasado salvo con está. Absorbe el sudor y lo transforma en un olor tipo las camisetas térmicas, con el impedimento de que no puedes lavarla cómodamente en la lavadora.
Probé ha darle un lavado en la bañera, pero el olor volvió en la primera salida.

Uno más mejorable, es el tema de los portapiolets (G). Sólo tiene uno, con un sistema de ajuste en la parte de abajo sobre una cinta y en un lado. En la parte de arriba es mediante una goma. Para evitar que la goma esté soportando todo el peso, puedes usar la misma cinta de compresión que lleva una tela cosida a su final.
Al otro lado lleva gomas arriba y abajo y según el fabricante es un porta bastones. Lo he usado para el piolet y aguanta, aunque queda muy abierta la hoja.


Puntos fuertes:
Su precio en comparación con otras mochilas de similares características, la resistencia al uso y desgaste de su cremallera frontal. La resistencia de sus materiales externos al roce, los detalles como ese bolsillo de la cintura que comentaba, las dos salidas para el tubo de hidratación (H), el enganche para este (I), las cintas de reposo de manos en las hombreras (J), el asa de trasporte con una goma (K) y la gran espaciosa seta, que también lleva una cremallera interna.


Resumiendo: Una mochila para aquellos que no tiene mucho poder adqusitivo y buscan esta capacidad poco común, sin pretensión de realizar grandes gestas con ella.

25 de marzo de 2009

POR UN USO RESPONSABLE DEL CARRIL IZQUIERDO

He conducido en países como Marruecos, Grecia, Italia y Estados Unidos y por este mismo orden, la mala conducción. Empezando por el desastre que es Marruecos, los adelantamientos triples y cuádruples de Grecia y por último la velocidad y caso omiso de los pasos de peatones de Italia.
En Estados Unidos (Al menos en California) por el contrario, las conducción es relajada, respetuosa con las señales de velocidad y lo más importante, cortés con el que va a al lado.
En España, nadie piensa en el de al lado salvo para verle como un enemigo que intenta adelantarte u ocupar un puesto delante de ti, resultando ser una competición continua que no notas hasta que no conduces en otros sitios del mundo donde sí que se piensa en los que se tiene alrededor.

Todos hemos oído que hay más montañeros que han fallecido en la carretera que escalando.
No sé si este dato es cierto o tan solo es una leyenda.
En cualquier caso es un hecho que nos pasamos mucho tiempo en el coche para poder desplazarnos a nuestros destinos y por lo tanto también es parte de la escalada.

Este post es también una autocrítica, ya que hasta hace relativamente poco, yo también era culpable de los atascos por conducir mal.

Me explico:
Una de las cosas más importantes que te enseñan en el carnet de conducir, es que el carril izquierdo es sólo para adelantar, pero por alguna razón esto se nos olvida cuando vemos que hay más de un carril izquierdo y tendemos a usar el central por norma.

Esto además se acrecienta si nuestro vehiculo es de los caros.

Señores/as, usar el carril derecho no produce urticaria y tampoco degrada la calidad de su peazo coche.

La excusa que más he escuchado cuando he tratado el tema es: “¡No voy a estar todo el rato cambiando de carril!
Mi respuesta es: Piensa que sino, obligarás a los que vienen detrás, en el carril correcto (derecho), a cruzarse dos carriles para poder adelantarte correctamente por la izquierda.

¿Cuantos de vosotros os habéis visto obligados a cruzar varios carriles en una autopista para adelantar a estos coches que invaden el carril central sin estar adelantando?

También muchos con los que he hablado sobre el tema, me han puesto del otro lado, justificando la velocidad.
Es que si vas a 120km/h, no te pueden adelantar”
Correcto, pero en cualquier caso si no estas adelantando deberías ir en el carril derecho ya que el izquierdo es solo para adelantar.

Evidente es que todo esto es para cuando el tema está fluido como en la imagen de más arriba.
Si hay caravana, lo suyo, dicen, es ocupar el resto de carriles para hacer más fluida la circulación.
Resumiendo, la cosa de ir por los carriles de la izquierda, parece ser que es por dos razones: Vagancia de giar el volante un poco y de pulsar el intermitente para cambiar de carril, sumado a que nos importa una mierda la gente que hay al lado, detrás o enfrente. Dicese también de falta de empatía.

¿Un problema de educación y cultura? Puede ser. Pero lo pagamos quien hemos rectificado nuestro error.


Y hablando de intermitentes ¿Sabéis cuando se han de poner en las rotondas?

Pues siempre a la derecha, cuando salimos y ocasionalmente, por ejemplo, cuando vamos a salir por la misma salida que hemos entrado (cambio de sentido) y en ese momento, de nuevo el intermitente de la derecha.
¿Para qué? Preguntareis muchos. La respuesta? para que los demás sepan que vas a salir y la circulación sea más fluida…pero claro, para eso es imprescindible pensar en los que te rodean tanto como en nosotros mismos.

Qué os parece ¿Lo intentamos?

NdelA: Decenas de artículos y blogs hablan sobre el tema del uso responsable del carril izquierdo, pero entre los que he leido, este es el que más me gusta.

23 de marzo de 2009

CADA DOS DE CUATRO (PICO DE LA MIEL+ PARED DE SANTILLANA+MOGOTE DE LOS SUICIDAS)

Primero las disculpas:
Los asiduos al blog, os habréis percatado de la falta del segundo post semanal. La razón es que ha sido una semana de locura entre otras cosas...
En tres días, he cambiado de lugar donde pasar el puente un montón de veces. Que si para la Norte del Perdido, que si para BDR, que si para Cuenca, que si al final me quedo en casa y paso de salir…

Al final, a ultimísima hora, concreto por fin dos planes a cual mejor :)

Viernes 20
- Que hay Fer – Le digo mientras extiendo la mano al saludarle, para seguidamente sacar la guía de la cabrera de la furgo y mostrarle la propuesta que habíamos hablado la noche anterior.
- Ah muy bien tiene grado sencillo, pero yo nunca he hecho artificial – Me dice dubitativo.
- No te preocupes – le digo para tranquilizarle – el artificial equipado es algo bastante mecánico, te lo explico insitu y en seguida le pillas el truco.



Al llegar bajo el magnifico y casi obsceno techo de la Cabrero-Capri, los dos tragamos saliva al ver que tan solo hay tres chapas hasta la salida de este.
Dudamos unos instantes pero finalmente nos armamos de valor y material y comienzo el largo decidido a pasármelo bien.

El primer tramo es en libre y serán pasos de 6a con tres chapas, en travesía a derechas, en un peculiar muro blanco negro y naranja, bastante sucio, sobre todo en su parte más alta.

He pasado las dos primeras chapas y estoy cerca de la tercera, buscando la sencillez del paso para conseguir llegar a esta sin cansarme demasiado, ya que sabía que el techo me iba a obligar a estirarme con ganas.

Las manos agarrando de forma lateral un pie izquierdo en oposición, el derecho un poco más alto buscando la adherencia en un filo romo algo musgoso y la ultima chapa ya lejos de mi.
De repente sin comerlo ni beberlo se me resbala el pie y de mi boca salen las palabras mágicas cuando compruebo que las manos se separan de la roca irremediablemente.

¡Pilla Fer!

Vuelo lateral sin consecuencias, ya que tengo un gran asegurador que está atento a mis movimientos y me frena sin problemas de manera perfecta.
Me recupero y vuelvo al lugar de la caída. Acero de la chapa y me recoloco de nuevo un poco más a la derecha para por fin llegar a la siguiente y última chapa.
Desde aquí se llega al comienzo del techo, donde coloco un nº2 para poder alcanzar la primera chapa del horizontal techo.

Colgarme de esta es sencillo, lo peor venía ahora ya que he preferido dejarle a Fer los estribos buenos y yo apañarme con un cordino anudado y un estribo de 4 peldaños, de esos antiguos, y no resultan nada cómodos los cambios y estiramientos necesarios para llegar a los siguientes.



No sin poco esfuerzo, llego a la 3º chapa del techo donde compruebo que alguien se ha dejado un grueso maillón ¿?. Tras colgarme de este, veo lo que me espera y compruebo sorprendido que se ven pocas chapas para ser un artificial.

Bueno, ya me preocuparé de eso cuando salga de aquí…

La primera chapa para salir a la placa, requiere de o bien ser muy alto o llevar un estribo de 5 peldaños para poder subirte y llegar a ella.
Como no tengo ninguna de las dos, me veo obligado a bloquear con la izquierda sobre una regleta que tiene la roca y lanzarme con la cinta en la otra para chapar el seguro dinámicamente.
El primer intento no lo consigo, pero en el segundo tras un descanso, chapo.
Una vez chapado toca subirse a la regleta en un paso algo duro pero con la cinta por arriba sales bien.

¿Y esto? No me digas que hay que sacárselo en libre!
Yo pensaba que esto era artificial hasta la primera reu!

Por la distancia de la siguiente y la imposibilidad de proteger de otro modo, no me queda otra que hacer un paso en libre para poder chapar el siguiente seguro, por lo que con sumo cuidado y con el coco cambiado tras los paso de artificial bloqueo de unas regletas que me quedan a la altura de la cintura tras subir el pie derecho a otra regleta y tirar sin “miedo”, en busca del equilibrio para enlazar la lejana siguiente chapa.

Uff…

Sorprendido por el paso, decido descansar y observar lo que me queda para analizar los restantes movimientos.



Estoy viendo los siguientes pasos y descubro que hay una cabeza seccionada entre medias del que veo a lo lejos y del que estoy colgado!



¡Mierda, esto está desequipado para que se haga en libre si o si!

Investigo un poco más abajo y descubro otro seguro seccionado donde me he tenido que dar ese extraño paso para subir hasta donde estoy.



Bueno pues habrá que tirar en libre…



¡Fer, a loro que tengo que salir en libre vale?!

Toca estudiar la roca con detenimiento ya que estoy en una especie de panza donde solo hay una patatilla a la derecha y una regleta ínfima de media falange y roma para la mano izquierda…el resto? Nada.

Lo pruebo una vez, dos y hasta intentando llegar a pisar la chapa…pero nada. El paso es brutal.
No sabría que grado, pero fuera del alcance de mis posibilidades de coco ya que la caída sería contra la repisa y me quita las ganas.



Cambio de planes Fer, me bajo!

Coloco un maillón y Fer comienza a bajarme con cuidad mientras por mi cabeza pasa la imagen del techo y la dificultad que supone recuperar los seguros puestos.
¡Me tocaba hacerme el artificial de nuevo pero en sentido contrario!

Sudo tinta que chorrea por todos los poros de mi piel hasta que por fin toco suelo firme.

Bueno Fer ¿Qué te apetece hacer? – Le digo convencido
¿Pero aun tienen ganas de escalar? – Me responde con sorprendida cuestión
Jejeje yo siempre tengo ganas de escalar - afirmo

Sacamos la guía y le propongo hacer una combinación de varias, empezando por una y saliendo por donde nos indique la IA.
El plan le gusta y nos ponemos en camino hacia el comienzo de la Casera Atómica.



Estoy terminado el largo cuando unas voces desde el pie de la vía Piloto nos hacen mirar y reconocer a una pareja. Paz y Manu que andan de celebraciones.

¡Felicidades a ambos!



Tras enlazar con la reunión de la Harakiri ...



...y continuar por esta un largo, pasamos al último largo de la Rivas–Acuña...



...para salir a pocos metros de la cima, consiguiendo un precioso y asequible recorrido de unos 150m de máximo 6a.



Unas clásicas después estamos cada uno en su coche, con la promesa de volver a repetir tan grata experiencia.

Nota para mí: Devolver a Fer, mosquetón de seguridad olvidado en el estribo.


Sábado 21

Son las 16:00 cuando estoy tirando del freno de mano y apagando el motor en la cola que se ha formado delante de la barrera. Para evitar que se caliente más la furgo ya que el chivato del agua se ha encendido varios kilómetros atrás y el olor a anticongelante me advierte de posible calentón.



No hace frío pero tampoco calor ya que el viento se encarga de recordarnos que aun es Marzo.

Media hora de espera después, por fin estoy en camino hacia cantoco, donde ya me espera JJ.

Estoy a punto de cargarme la mochila para bajar al puente donde deduzco debe estar esperándome cuando escucho una voz a mi espalda que me suena muchísimo.

- Fíjate que casualidad! – me dice con la mano extendida me dice con la mirada oculta tras gafas oscuras de sol
- Javier Menchero! Qué pasa macho cuánto tiempo! Que tal esa rodilla!

Tras unos minutos de intercambio de sonrisas, recuerdos y promesas de volver a vernos me despido cargándome la pesada mochila a la espalda.

25kg tiene la culpa y tres horas de subida la razón.

Efectivamente JJ me espera abajo.
Tras subir a por su mochila al coche y cargarla, empezamos el largo camino de subida hacia la Pared de Santilla, para pasar noche a sus pies.



Decidimos ir por el Collado de la Deshilla que lo conocemos mejor para pasar por delante de sitios tan espectaculares como Mataelvicial.



O el Torro.



Sorprendidos, comprobamos que aun se mantienen muchos neveros vivos que nos hacen de vez en cuando hundir las piernas hasta la rodilla con algún susto.



Tras la Bola de Navajuelos…



Por fin vemos nuestro objetivo cuando apenas queda media hora de luz.



Aun con claridad llegamos a la pared tras casi 3h de duro camino por nuestra pesada carga.



Con esta claridad elegimos sitio para el vivac.
Pocas opciones hay, ya que la nieve ocupa la parte buena y tan solo nos quedan dos “planas” piedras inclinadas como cama y estás son las finalmente elegidas.

Un vivac sin vino no es un vivac…



Cuando estamos cenando, comienza a soplar un desagradable y frío viento que ya no pararía el resto del fin de semana acompañándonos durante la noche y consiguiendo que durmamos muy poco, al no haber traído ninguno de los dos funda de vivac y estar expuestos al frío viento que sube por la canal.

A mi se me ha olvidado la cuchara…
A mi la soja…
A mi los guantes…
A mi el gorro…


Domingo 22

Amanece un día frío acompañado del incesante viento consiguiendo una sensación térmica realmente baja a las 07:15 cuando decido levantarme a desalojar líquido.



A esto encima se añaden unas nubes que tapan el sol hasta pasadas unas horas consiguiendo que nos veamos obligados a esperar para poder empezar a trepar.



Por fin el sol gana terreno y nos deja empezar a pensar en escalar más que en “qué más me puedo poner encima para no helarme el culo”
Nos decantamos por la vía Peñalara por su característico techo.



Tras subir por la canal de acceso para atacar la vía, comprobamos que su primer largo es demasiado raro…hay que montar reunión arriba y luego destrepar para pasar por debajo del techo, realizando otra subida…un zigzag poco prometedor que finalmente descartamos.



Ya que estamos aquí nos guiamos por una cinta en una seta con un maillón.



Sin discusión JJ se calza los gatos y le da de primero a este preciso y curioso largo de V+.



Más tarde, veríamos que se trataba de la vía Landiacrash abierta por Josechu Jimeno y Rafa Fanega en el 94.
Consta de dos largos siendo el segundo de IVº y terminado en el mismo sitio que la Sur Clásica. En un par de chapas en al cima, con unas vistas espectaculares de los Fantasmas, Las Torres, etc.



¡Uff cuanta fisura aun por escalar!



Tras un rápido descenso, nos planteamos ir al Risco de San Pedro que queda a la derecha de la Pared de Santilla a unos 500m, pero finalmente nos decidimos por el Mogote de los Suicidas o también llamado Virgencita.



El viento no nos ha dejado, pero el sol parece que acompaña con más intensidad y me decido a escalar la Sur Clásica con sólo la camiseta y el chaleco.

Craso error!

Este largo me lo doy yo.

Según los diferentes croquis de los que disponemos el grado de este primer largo varía entre 6a+ y 6b.
Comienza por un pequeño canalizo con gendarmes inestables que te dejan en una repisa. Desde aquí pones la primera cinta en reluciente chapa bicromada.



El paso que viene a continuación es muy difícil y expuesto…y no me lo pienso mucho. Acero que te crió y chapo la siguiente que me sorprende esté tan cerca.

Esto está equipado para artificial…

Lo siguiente es un clavo con un ojal crujiente que no invita a entretenerse mucho hasta alcanzar una gran seta de la que ya se sale en libre hasta el siguiente alejado bolt.
Paso de IV+ hasta que se llega a una nueva secuencia difícil. De nuevo veo claro que el equipamiento está para artificial, por lo que acero sin condición hasta pasar dos chapas más.
Pero aquí se acaban las presentaciones y comienza la fiesta.
El paso siguiente te exige hacerlo en libre si o sí por lo que lo hago tras unas pocas dudas. Lo malo es que en esa chapa he puesto mi última cinta y ya no tengo más que los mosquetones de la reunión. Un error de cálculo había dejado el resto en posesión de JJ a unos 20m de mí.

Por suerte recuerdo que los estribos que cuelgan tras de mí tienen dos mosquetones por lo que soluciono el problema usando estos.

Lo siguiente tras este paso es proteger una travesía a derechas al comienzo con un 0,5 de Camalot y el resto (Vº) sin nada, hasta la colgada reu.



Tras un rato JJ llega a mi lado comprobando lo mismo que yo.



Juer, vaya viento frío que pega aquí no?

El siguiente largo es un artificial que sale por el lado izquierdo del desplomado bloque cimero, donde comienza (según croquis) con 4 pasos de artificial sobre buriles.

JJ va ha comenzar el largo, cuando se da cuenta de un detalle importante.
Al parecer requiere de chapas recuperables y no las trajimos (no las encontró JJ en su casa), pensamos en tirar del cable del los fisus…pero claro, estos no funciona en artificial si los buriles están en desplome, por lo que descartamos seguir por ahí.

Miramos de frente y descubrimos un calvo con un maillón…¿?…Mmmmm y tras este una chapa.

Según los croquis que llevamos advierte que tras un paso de A0 hay una placa expuesta de 6a, o lo que es lo mismo sin posibilidad de proteger.

Mientras estamos decidiendo qué hacer, yo me estoy quedando pajarito y la prueba es la tiritera que ha empezado a gobernarme.

- Yo voto que para abajo – Me dice JJ
- Puessss…sss sea – Digo sin vergüenza tiritando.



Abajo el viento es menor pero no sobra ninguna prenda.
Miramos la hora y vemos que ya son casi las 15:00 por lo que damos por terminada la escalada y decidimos darnos a la comida y a la bebida, antes de comenzar el largo descenso.



No tardamos mucho en coger temperatura con la activa bajada, haciendo planes de futuro…y es que ya se acerca épocas de procesiones y momento de planes de altura.



Clásicas de rigor y rezos por no haber perdido la cartera y llegar sin grúa a casa.



NdelA: Estos son otros títulos que se quedaron en el tintero:


COMBINANDO PAREDES

PAREDES SUICIDAS

TERMINA-DOS

PRIMERAS CON SEGUNDOS

16 de marzo de 2009

NUESTRA ROAD TRIP (BOLA DE SAN ANTONIO, HUECO DE LAS HOCES)

15 coches entramos de golpe en la curva de acceso a la barrera que da al parking de cantoco y mi cabeza se mueve de lado a lado negando por la alta posibilidad de no pasar por esta a pesar de ser sólo las 09:00.



Me equivoco y pasamos sin pararnos los 15 sin ni siquiera parar a coger bolsa y panfleto ya que no hay nadie aun en la barrera.

Alli ya está Jose Miguel esperando paciente nuestra llegada.
Poco después aparece Alberto, alias FreeClimber, al que paramos con dudas el coche, ya que no nos conocemos más que de la Internet y de un esporádico saludo, sin luz, en los chiringos de Cantoco.

¿Como me habéis reconocido?

El plan inicial es ir a las Buitreras para realizar alguna de las míticas vías de la zona como son Orejas de Dumbo, Peninsulares, Boomerang o la famosa MocoClimbing en Cancho Amarillo, pero cambiamos de idea radicalmente y nos decidimos por una vía a la que le tenía echado el ojo desde que me compre la guía de Tino.

Os hablo de la Route 66.6, abierta por Uge y "El Trompeta" el año pasado y que se la considera la vía conocida, más larga, de la Comunidad de Madrid, hasta la fecha. 270m y 8 largos, con un grado de 6b/A1 según el croquis de Uge (al loro que tarda en cargar el PDF) y 6c+ y A1 obligado 6a+ según la guía de Tino.
Decir que el de Uge no lo teníamos y lo vimos después, por lo que nos fiamos de las reseñas de la guía de Tino.

Después de decidir que cuerdas subir y que material repartir, nos decantamos por un juego de friends con los números 4 y 5 otro juego de Aliens y dos cuerdas de deportiva 10mm.

Ya no me acordaba de lo que cuesta escalar con cuerdas tan gruesas

El camino nos lo tomamos con calma ya que requiere de bastante atención por no ser de los más evidentes de la Pedriza ya que se trata de subir al Hueco de las Hoces.



Un camino que si eres habitual lo puedes hacer en 1h30min, pero nosotros lo hacemos en algo más de 2h.



Cuándo son las 12:30 por fin visualizamos nuestro objetivo que queda a la izquierda del vertical y compacto Pan de Kilo.



A primera vista se adivina una serie de terrazas que van cogiendo altura con bastante discontinuidad. Luego, con los prismáticos y el croquis de la guía, vamos adivinando el recorrido que debemos hacer.



El acceso a pie de vía es bastante confuso y a pesar de intentar llegar a él con empeño terminamos en el comienzo de otra vía, con chapas oxidadas, que según la guía de Tino llaman Desconocida de los 90 6c y A0.



Miro la hora cuando termino de atarme los gatos y compruebo que son las 13:15, así que tenemos algo más de 6 horas para terminarla y bajar con luz. De sobra.

Desde el principio Jose y Alberto me ofrecen hacer toda la vía de primero lo cual me parece genial, aunque les ofrezco la posibilidad de realizar alguno de los fáciles.

El prime largo resulta ser de comienzo sencillo con una "rimaya" a su mitad la cual protejo con un alien gris y otro naranja.
Los paso más que difíciles son técnicos con el agravante de que el seguro que hay en el paso un poco más arriba es un clavo roñoso más antiguo que mear en pared. (6a)



Ya los tres en la reunión que enlaza también la Route 66.6, nos "acomodamos" para repartir material, y encauzar el segundo largo.



Este resulta ser improtegible y paseo los cacharros a modo de lastre. Tras las primeras 4 chapas, me voy hacia la derecha yendo todo recto hasta el árbol que se adivina en una amplia repisa. (IV+)



El árbol tiene una cinta y un cordino con un mosquetón de obra. Se trata de un roble, si no me equivoco, con apariencia de estar muerto, por ser de hoja caduca, pero sus agallas dicen lo contrario.



Tras esta reu, viene un "paseo" a la derecha con un paso de IV+ que protejo laceando una rama del siguiente árbol.

Tras este paso, llegar a un gran nicho con suelo plano, del que sale una chimenea que en enlaza con una travesía a izquierdas.



Para montar reunión me bajo al nicho que está a un par de metros más abajo.



Desde aquí aseguro a Jose y Alberto que llegan al curioso emplazamiento de la reunión.



Tras estar los dos en la cómoda estancia, me dispongo a realizar el siguiente largo donde me esperaban varias sorpresas.

¿A quién le gustan la travesías?

El largo comienza con un paso de bavaresa que luego te pide a cambiar de posición poniendo la espalda en la pared para aprovechar la laja que sobresale de la otra pared. Desconfiado por su resistencia, saco el gran nº 5 de mi arnés y lo coloco bien arriba, para evitar la caída contra el suelo del nicho.

Como vamos con cuerdas de 10mm dudo en chapar las dos ya que el rozamiento iba a ser brutal con ese pedazo zigzag, pero si no lo hago así mis compañeros lo pasarían muy mal.
Aun así me veo obligado, por falta de otro número 4, a dejar una de las cuerdas con mucha comba. Pero se podría solucionar chapando luego el segundo esta por número 5 que aun estaba en la chimenea.

Tras unos pasos de 6a, llego a la primera chapa, habiendo puesto el nº5 y nº4, pero este último decido recuperarla al ver lo que me espera.



El paso de incorporarme a la delgada fisura sin manos, lo tengo que acerar.
Tras colocarme comienza un baile sin mano con la cara pegada a la roca y adivinado con el tacto de los pies el lugar donde mover el siguiente.



Las puntas de los dedos de los pies me arden pero la roca es adherente aunque con la clásica arenilla de poco uso.

Tras esta hay un largo trecho hasta la segunda chapa pero descubro, a mis pies, un emplazamiento un poco más adelante para el nº 4, que sabiamente había recuperado.

Me agacho con una delicadeza digna de un bailarín, y lo empujo hasta el fondo de la sucia fisura.



Una vez puesto, continuo los delicados pasos por un tramo ya más ancho.



Pero duran poco y el recorrido te obliga a bajar las manos hasta donde tienes los pies y comenzar un tramo más físico que salvas gracias a la siguiente chapa.




Una vez chapada esta tercera cinta, de nuevo te ves obligado a subirte con los pies arriba, lo cual hago acerando sin pensármelo.

La última chapa se llega con paso delicados y aquí decido pararme un rato a recupera le resuello, anclándome al seguro.
Sorprendido me asomo a lo que me resta de largo, viendo que no hay manera de proteger y que tampoco se ha puesto ningún seguro.

La dudas florecen en mi cabeza acompañadas de razonamientos lógicos.
Tengo que subirme al lomo y volver a hacer otra zeta con lo que el rozamiento va ha ser brutal con el aliciente de que no hay ningún seguro ni posibilidad de protección hasta la reu.
Si por un casual le rozamiento de la cuerda me bloqueA y desestabiliza en la placa, o la arenilla consigue que resbale, la caída sería algo más que fea ya que me voltearía de espaldas y dependiendo de la distancia recorrida, posiblemente impactase contra la repisa.

Jose y Alberto tampoco lo ven claro, pero la lucha interna ya ha llegado a su punto culminante y es el momento de dejar a la mente que discuta por su lado y sencillamente hacerlo.

Salgo al lomo triando de una patatilla roma y me incorporo con ambos pies.

Ahora ya no hay marcha atrás...

Tiro de la cuerda con la mano derecha para darme un metro y subir sin resistencia, pero el rozamiento es brutal, por lo que sólo consigo hacerlo con unos poco cm.
Subo un poco más y mis manos tienden a cubrirse de humedad, exigiendo magnesio para aferrarse a las rugosidades que ofrece la roca.
Tiro otro poco de la cuerda y subo más arriba...de repente estoy en terreno sencillo y la reu a 3m de mi cara.
Es en ese momento cuando soy consciente que ya no me voy a caer y no puedo evitar soltar un grito al llevarse todos mis músculos de insultante adrenalina.

En la reu escucho que Jose y Alberto hablan y deduzco rápidamente que están dudando de seguir lo cual me parece razonable viendo que esto no era lo más difícil de la vía.



Un rato después, está Alberto a mi lado, mientras Jose, nos dice que él se va a esperar, en la amplia repisa de la reu del árbol, a que terminemos la vía.

Tras poca divagación decidimos que no es buena idea separarnos y nos bajamos los tres hasta la reu del árbol dando por finalizada la ascensión.

Tras tres obligados rápeles para llegar al comienzo de nuestra escalada y lugar donde habíamos dejado las mochilas, recogemos y nos encaminamos junto a animada charla en la que se mezcla de todo un poco, llegamos a cantoco donde disfrutamos largo y tendido de una clásica mientras planeamos futuras escaladas.


NdelA: Estos son otros títulos que se quedaron en el tintero

TRES HOMBRES Y UN DESTINO


ROUTE 66.6


AGARRENSE QUE HAY CURVAS


LAS TRAVESURAS DE SAN ANTONIO