26 de enero de 2009

¿CUÁNTO DURA UN BLOG?

Es una cuestión que pocos se plantean al comenzar uno.

Pero es tan importante como la razón por la que lo empezaron.



Es una pregunta que ni siquiera asoma cuando se toma la decisión de empezar.
Dicen que hacerlo es signo de pesimismo, otros que es signo de ser previsor.

Innegable es que en un momento dado, durante cualquier Principio, pasa por la mente un Final.



No, no, tranquilos esto no es una despedida ni nada que se le parezca. Aun me queda mucha guerra que dar mientras el cuerpo y la mente aguante ;)

Este post, otro nuevo del la tan visitada etiqueta de "Filosofando...", es sobre esas razones por las que creas un blog de montaña o dejas de actualizarlo.
De paso os contare cual fue el inicio y razones por las que comencé con el mío que sólo unos pocos conocéis. Unos por ser participes de ese comienzo y otros por que os lo he contado en alguna conversación o mail.

Pero todo eso, al final del post ;)

Antes, pasemos al razonamiento que he llegado tras llevar leyendo muchos blogs durante años, viendo como unos han desparecido, otros postean muy de vez en cuando y están confinados a la desaparición, otros, los menos, que resisten al paso del tiempo y por último los que esta´n comenzando un poco desorientados buscando su estilo.
Como dato diré que la medida de los que visitaba y han desaparecido, no ha pasado la barrera de los dos años.
En cualquier caso, muchos de ellos tienen en común esas razones de las que hablo.


Razones habituales:
Según mi opinión personal, las principales razones por las que se crea un blog de montaña son:

- Has leído uno y te ha motivado a creártelo.
- Te encanta la fotografía y quieres mostrar al mundo lo que haces.
- Querer guardar tus experiencias para no olvidarlas y además compartirlas.

Según mi opinión personal, las principales razones por la que se deja de actualizar son:

- Falta de constancia
- Falta de tiempo
- Falta de visitas o comentarios

Estoy seguro que hay muchas más razones pero esas son las que, a mi modo de ver, hacen que alguien decida crearse una bitácora personal o deje de actualizarla.


¡Esto no es Bambi chaval!

Pero no hay que llevarse a engaños, esto no es Bambi. Un blog da trabajo, a veces mucho y así es como deberías planteártelo.
Una veces te dará alegrías y otras no tantas, pero es importante que disfrutes haciéndolas y pensado (muy importante) que primero debes hacerlo por ti, tus amigos y familiares. Sí cometes el error de crear sólo para los demás, enseguida caerás en el desánimo.
Todo esto hablando de un blog personal por supuesto, si es técnico o profesional, la historia es muy diferente, pero no es el caso que aquí quiero tratar como podéis ver




Mis razones:

Ya sabéis que no soy dado a contar cosas de mi intimidad, pero en este post me salgo un poquito del tiesto por que merece la pena para aquellos que se estén planteando tener uno o quieran aportar algo nuevo al suyo.

Cuando yo lo cree, hace ya cerca de los 5 años, tan solo existían unos pocos blog de montaña, entre ellos el de Oskar, que aun sigue batallando cada semana contándonos sus actividades y entre otras cosas, los desagradecidos requipamientos que hace. Desde que conozco este blog ha seguido rindiendo igual. La razón? la constancia. Cualidad fundamental para llevar a cabo empresas de este tipo de la que solo sacas el tener un recuerdo con texto y fotos de tus actividades y lo más importante, muchísima gente nueva por conocer.

En mi caso, la razón por la que lo empecé, fue por querer guardar mis experiencias para no olvidarlas y además compartirlas.

Todo comenzó hace ya muchos años, cuando éramos sólo un Grupo de Correos en Yahoo, que nos habíamos hecho llamar ChapaYSigue, donde nos mandábamos mails para hacer quedadas, hablar sobre monte y compartir información.
En un momento dado, mi gusto por escribir (con mis errores ortográficos) sobre las actividades que hacía para tenerlas guardadas como recuerdo ante mi falta de memoria, hizo que comenzase a mandar la historia del finde vivida al grupo, junto con algunas fotos.
Incluso me atrevía a contarla con alguna presentación y dibujos cachondos en plan South Park.

Un día, a principios de SEP de 2004, uno de los componentes del Grupo ChapaYSigue, casi como un visonario (jejeje) me propuso crearme un blog al ver que era justo lo que necesitaba.

- Un blog? - Pregunté extrañado - Qué es eso?
- Si hombre, mira, yo tengo varios - me dijo mandándome un link.

Sorprendido por lo sencillo que era crear uno junto a las herramientas y espacio gratuito que daban, comencé, curioso como un gato, esta gran aventura, con la intención de dar a conocer a los colegas y amigos de estos, las aventuras que vivíamos, comenzando este con una vía que habíamos escalado recientemente.

Lo malo es que, al poco de comenzar con este, me llegó una lesión.

Rotura de menisco interno con asa de cubo.

Por aquel entonces, ya llevaba en esto casi 6 años, con algún parón si, pero nunca por una lesión con operación.

Tenía para varios meses…

La desesperación ante una situación desconocida, me hizo buscar información por todos lados. Sorprendido descubrí que, a pesar de ser una lesión muy común en la sociedad, no existía nada ni nadie que hubiera contado su experiencia al mundo. Decidí entonces, que ese sería mi objetivo durante esos meses de estanco: contar mi experiencia y que además sería una forma de ayudar a todos aquellos que como yo, se encontraban y encontrarían con que en la red no había nada sobre la experiencia personal con una lesión de este tipo y lo más importante: el después...¡Ay el después!
Si una palabra resume esa sensación es Incertidumbre. ¡Terrible!

A día de hoy, y tras casi 450 post publicados, aun recibo mensajes relacionados con estos post del comienzo del blog.

¿Las razones por las que dejaría de hace el blog? Uff difícil respuesta.
Creo que mientras el cuerpo aguante y la mente esté lúcida, seguiré a pie de trinchera, con el teclado como fusil, disparando con cada pulsación letras, palabras, frases y post como balas. ;)

En confianza os digo, que lo cierto es que me gustaría fuera sempiterno y que otros cargaran con él tras mi final, pero a día de hoy, mi intención es seguir adelante, escribiendo, publicando, creando cada semana uno o dos post, ya que aun me quedan muchas historias de montaña que contar. ;)

AJUAR TEXIL MONTAÑIL

Muchos recordareis el post de hace tres años titulado El Escalador medio, en el que hacía mención a ciertos habituales en los que muchos coincidíamos. Entre ellos en el tema magnesera vieja, descolorida y roída.



Han pasado ya unos años de aquel post y ahora quiero acompañarle con otro que habla sobre la vestimenta rescatado de los múltiples borradores que tengo en el blog haciéndome recordarlo gracias a Jonchu y su último post/pensamiento.

Como el tema puede ser amplio, antes definiré a que tipo de montañero me refiero.
Este es una persona que vive en España, con un poder adquisitivo más bien bajo, al que le gusta tocar casi todos los palos de la montaña, como son la escalada deportiva, clásica, bloque y nieve, abarcando en este último el tema corredores y lo que engloba.

Aclarado esto, paso a haceros mi apreciación personal sobre el tema, en el que imagino algunos os veréis identificados empezando por la cabeza y terminado por los pies.

Cabeza:
- Son pocos los que usan algo para tapársela y los que lo hacen suelen ser por que tienen poca densidad cabellera o por que les gusta de combinar con sus pantalones, camiseta o gatos.
El gorro suele ser de dos tipos, o bien el clásico recto de lana y acrílico o el Peruano, estos regalados por alguna novia, ganado en sorteo, encontrado olvidado por alguien o adquirido en algún viaje. Esto último lo más raro.



Gorra son pocos los que las llevan aunque algún clásico queda.



Cuello:
- La clásica braga suele ser usada por muchos y unos pocos el carísimo BUFF.
No verás a nadie con bufanda.



Tronco:
-
Una chupa de GoreTex, suele ser lo más habitual. Cortavientos y transpirable (claro) y sin forro interior. Esta tendrá al menos 2 ó 3 años y algún roce o rotura especialmente en las mangas. Un día de estos la guardará en el baúl de los recuerdos y se comprará otra…pero sigue pensando que esta aun le aguanta otra temporada.



Los colores suelen ser o rojo o amarillo y la marca más habitual Trango*.
- Un plumas con mangas y sin capucha, con algún remiendo por enganche o quemadura de hornillo o cigarro (de la risa o no) que le da un aspecto de currado. Quiere comprase otro pero el precio de estos le echa* para atrás y siempre lo deja para lo último.



- Dos forros, uno del Decathlon, de esos baratos, casi siempre de color negro y otro de Polartec 300 ó 100 de marcas como Berghaus, Millet, Trango, Grifone, etc, que en muchas ocasiones es cortavientos. Este tendrá casi tanto tiempo como el que lleva escalando y contiene alguna quemadura por la parte de la barriga o pecho.



- Un chaleco, fino, que será cortavientos si el forro con Polartec no lo es. Este suele ser o negro, rojo o las dos cosas.



- Camisetas térmicas tendrá tres ó cuatro, una de manga corta y dos de manga larga. Los colores suelen ser negra o gris y de variadas marcas. Si tiene otra de manga corta es posible que sea de Decathlon.



- Las camisetas de algodón pueden variar de tener dos a tener mogollón. Esto depende mucho la calidad de las mismas.

Manos:

- Guantes tendrá varios con un número indeterminado, pero si que tendrá unos finos con agujeros en los dedos índice y pulgar debido a que los velcros se los han comido. Por alguna razón no los tira y los sigue usando.



También tendrá unos guantes buenos, de invierno (y caros), posiblemente de la marca española Isard que adquirió tras una mala experiencia en una actividad de montaña en la que pasó mucho frío por llevar unos guantes baratos.



Piernas:
- Pantalones tendrá unos de actividades invernales, negros, con remiendos en los bajos debido a los cramponazos recibidos y que usa también para cuando hace algo de esquí en pista.



Para escalada en roca tendrá tres largos. Unos más finos para verano, que fue los primeros que se compró y aun usa, otros más gruesos para días fríos y unos terceros que adquirió tras un arranque de compulsiva compra y que cuida más. Estos últimos son los únicos que no tienen algún roto.
También tendrá dos cortos, posiblemente pirata para cuando hace más calor. Marcas como Prana y Decathlon sulen ser los más habituales.



Además tiene dos mallas, unas gruesas y otras más finas que usa para dormir en el saco cuando vivaquea en invierno y para ponerse bajo los pantalones de actividades invernales y alguna veces para escalar.




Pies:

- Calcetines de montaña tiene unos cuantos y casi todos del Decathlon. Los buenos los reserva para cuando va a realizar alguna gran pateada en invierno.
En el calzado voy solo ha hablar sobre el de pateo, ya que de gatos ya hice un post en su momento.
Tendrá para invierno unas plásticas que consiguió en un mercadillo a un precio tirado o le regalo/compró a algún colega. Raro es el caso en que se las compró nuevas.
También tendrá otra de piel que usa para actividades más livianas, de un día en nieve.



En el zapatero guarda unas zapatillas de trekking con suela vibram de caña baja y otras de caña alta.
A estas le acompañan modelos desgastados que ya no usa, pero que le da pena tirarlos y que hasta a veces se los pone por lo cómodos que son a pesar de su desarrapado aspecto.
Muchos se han pasado al lado 5.10 y en vez de Vibram lucen Stealth en su contacto con la Tierra, pero las viejas siguen ahí ocupando espacio.



Esto, evidente es que solo es una parodia de lo que podría tener en su poder un montañero actual español, aunque estoy seguro que muchos no se sientan identificados, otros tantos sentirán que alguien ha estado revisando su ajuar texil sin su permiso. ;)

*Corregido por Vari

22 de enero de 2009

MONTAÑAS DE UNA VIDA, DE WALTER BONATTI (LIBRO)

Sin lugar a dudas Walter Bonatti, fue, en su época, uno de los mejores y más duros alpinistas, que cumplió con unos sueños y objetivos que muchos ni siquiera rozamos a imaginar.



Una leyenda viva que hizo historia con sus hazañas, también en solitario.


Firmando el libro que compré en su reciente visita a Madrid

Un escalador con una ética indiscutible sobre el purismo en el estilo…pero este post no va sobre eso, va sobre el libro en si, Montañas de una vida y este deja bastante que desear en lo que se refiere a literatura.


Las historias que cuenta son realmente increíbles y la audacia y valentía (a veces temeridad) con la que realizó estas grandes actividades, dejan con la boca abierta a cualquiera, pero no se llega a trasmitir el calor humano. Notas que falta algo personal, es como si lo hubiera escrito medio obligado.
También insiste en demasía con las críticas recibidas de los medios de comunicación, viéndose mucho resentimiento hacia ese tema.
Está claro que se queja con razón, pero repetirlo casi en cada capítulo hace que pierda bastante la historia contada.

También comentar que (imagino que debido a la traducción al castellano) el estilo es más bien tirando a malo, cometiendo errores tan básicos como la repetición continua de terminos* como la palabra “empresa”.

Dudo mucho que W.Bonatti dejase que se escribiera algo así en el original, (no hay que olvidar que esto es una traducción del mismo) siendo como fue escritor varios años en la revista Epoca y sabedor de las bases de la escritura, por lo tanto solo nos queda que la traducción no fue como debiera.

Resumiendo, el libro merece la pena ser leído (mejor en su idioma original si sabemos italiano, claro jejeje) para conocer la historia y aventuras de este Gran montañero, pero te deja tan frío como un vivac a pelo en la cima del Mont Blanc. ;)

*Gracias por la corrección ;)

20 de enero de 2009

HIELO AMARGO CON SABOR DULCE (PEÑA UBIÑA)

Ya intenté en su momento diferenciar entre Valentía y Temeridad, en un corto pero concreto post en el que planteaba ciertas situaciones para poder diferenciar tan fina línea.
La decisión que tomamos en la reu de ese largo de mixto (roca y nieve/hielo) con un grado de peligrosidad de IV sobre VII, de grado M5 y una complicadísima protección, para algunos puede ser un acto de Valentía, para otros Temeridad…la decisión no fue unánime pero fue la de la mayoría…y salió bien.
Tuvimos suerte y de la buena



La semana comienza con la firme decisión de ir a un sitio a hacer algo de nieve. No hacerlo se podría considerar un crimen por el regalo que nos había hecho la naturaleza tras mucho tiempo (quizás demasiado) de espera para la nieve.

El problema era decidir el sitio ideal. Telera, Gredos, Fierro, Ubiña…Tras unas decenas de mensajes, nos decantamos por Peña Ubiña, situada en el límite que separa León y Asturias, siendo nuestra intención la cara leonesa, donde se concentran los mejores corredores para lo que buscamos.

Los componentes: Yago, Guille (el ultra máquina aunque no lo reconozca ;)) y el editor, diseñador, webmaster, corrector y creador de Historias de Montaña aparte de otras cosas ;).
La vía, propuesta por Guille, Directa Hielo Dulce a la cara Noreste.



Según las descripciones de diferente información que tenemos: Se trata de una vía con tres tramos de mixto, llegando a tener en lo más complicado, V+ de roca y una inclinación de hasta 80º.
Aquí aclarar que los corredores pueden cambiar muchísimo sus condiciones y grados, dependiendo de muchos factores, como son la cantidad de nieve caída, lo formada que esté y con ello la posibilidad de protección, de difícil a imposible como ocurre en el Fierro.
Con unos 550m y un horario estimado según las guías de 6h (máx) y una aproximación de casi 2h, le añades a esto la dificultad de MD.

Resumiendo, una vía seria.

Viernes 16
Tras el largo viaje hacia nuestro pueblo de destino, nos abrigamos bien y nos metemos en la parada de autobús de Torrebarrio, donde sacamos exquisitos manjares, regados con un buen reserva, como manda la tradición.



Tras decidir la hora de levantarse y preparar las mochilas para el día siguiente, Yago y yo nos metemos a la furgo y Guille decide probar suerte vivaqueando fuera de esta.
Son casi las 03:00 y nos levantaríamos a las 06:00, por lo que dormiríamos apenas 3 horas.

Sábado 17
La puerta de la furgo se abre y entra una bocanada de aire fresco que nos hace despertarnos. Es Guille avisándonos de que ya era la hora y de que al poco de acostarse se había tenido que cambiar de sitio y meterse en la parada de bus, ya que había empezado a nevar.



Sorprendidos comprobamos que han caído algunos centímetros de nieve y esta ha llegado a cubrir la carretera por completo.



Mientras Guille ya está listo, nosotros aun andamos peleándonos con los guettres.
Un rato después por fin salimos hacia donde suponemos es el camino de subida.
Cuando por fin localizamos me doy cuenta de que no he cerrado la furgo.



Me apetece tan poco recorrer de nuevo el camino hecho, que casi me convence Guille con un sencillo argumento para dejarla abierta.

¿Quien va a probar a abrirla aquí?

Casi 20min después estoy de vuelta y podemos emprender camino.

Uff este error me ha cansado…mmm…malo.

El acceso es una pendiente de escasa inclinación que con la nieve se vuelve algo pesada.



Como en mi anterior visita, un grupo de perros se nos une para acompañarnos durante la aproximación…esta vez solo dos de ellos se atreven a adentrase tanto como lo hicieron los de la otra vez.
Listos como ellos solos, en vez de ir abriendo huella, iban usando las que abríamos nosotros.
Curiosa actitud la de estos animales…era como si nos guiasen, como si de alguna manera nos cuidasen, exigiendo a cambio tan solo alguna caricia.



Son escaladores reencarnados…

Uno por tener un buen fondo y el otro por duplicar mi zancada, más la falta de fondo por el parón obligado que he tenido estos dos últimos meses en lo que se refiere a aerobicos, hacen que en poco tiempo me saquen una gran distancia.
Decido no forzarme ya que sé que aun queda muchísimo por hacer y quería reservar fuerzas e ir calentando las piernas para lo que me esperaba.

A mi ritmo.

Una hora y media después las primeras luces empiezan a iluminar las crestas cimeras con rojizos destellos que nos obligan a sacar la cámara y sacar recuerdos imborrables, al menos en nuestras mentes.



Espectacular amanecer en la parte de León.



El primer circo que nos encontramos nos hace dudar de si ya estábamos ante nuestro objetivo.



Pero gracias a los croquis que llevábamos de la Desni nº 182 y al mapa de la zona, desciframos que aun tenemos que continuar y bordear este circo para llegar al otro que es el de la cara Noroeste que buscamos, donde también está Elixir de la Suerte, donde hace 7 años atacaba, junto a JJ, Icoba, Pepón y JaviBP.

Poca gente en la zona y los que hay se quedan en los corredores anteriores, más sencillos y cercanos.



Tan solo nosotros tres nos adentramos en las pendientes sin poder saber el desnivel hasta estar metidos en ellas.

Nada más cruzar al otro lado del primer circo, comprobamos que las laderas contiene recientes aludes.



Por suerte nuestro camino no va por ahí, sino a la derecha.



Ahora si que veíamos el corredor de la Directa Hielo Dulce…y tenía una pinta brutal!



Nos ponemos los crampones sacamos uno de los piolets y cruzamos las pendientes que dan acceso al comienzo del corredor.



Con mucho cuidado ya que la inclinación en algunos tramos es bastante y hay que estar atento a cualquier crujido y pasar rápido.



Aquí, a pesar de mi intento por que mis piernas respondiernan correctamente cn eun buen calentamiento, el Vasto Interno de ambas piernas decide dejar de ser más flexible por hoy y el dolor comienza a transformarse en casi insoportable. Tanto que me obliga a pararme con frecuencia y masajeármelo para que el ácido láctico abandone la zona y se dedique a otras cosas y dejarme continuar.

Me hidrato lo que puedo sin pasarme para no quedarme sin agua rápidamente y como algo.
Pero el dolor sigue y el músculo no deja domarse.
Así que me dedico a continuar, pero con pasos más cortos, abriendo mi propia huella.



Al final la aproximación han sido casi 2h y 30min aprox.
Ya en la base del corredor, sacamos los dos piolets, ya que la pendiente es de unos 45º y ya hay que usar las dos manos para ascender.



Yago y Guille suben delante mientras yo hago algo de tiempo para aumentar la distancia para evitar que si resbalan me caigan encima, ya que un pequeño alud va cayendo casi de continuo por en medio y hay que ir por un lado para evitarlo.


Alud(din) from Vladimir Bustóf on Vimeo.

Tras hacer una cómoda repisa para atacar una parte más vertical (50º/55º) que te deja en el hombro desde donde empieza el tramo de mixto, que tiene un aspecto terrorífico como luego comprobaríamos.



Guille me ofrece este largo ya que es el fácil de los mixtos que hay, pero le dejo que lo haga él para probarlo con más seguridad de segundo.



Lo que le cuesta hacerlo y protegerlo no me da ninguna seguridad, pero el tío se lo saca en a penas media hora colocando cuatro Aliens y un clavo. Qu por otro lado es lo único que se puede poner.



Nieve y rocas caen a nuestro lado y a veces encima, por la limpieza que se ve obligado a hacer, ya que la roca esta cubierta de nieve blanda y el diedro ni si quiera se ve.

Sabio Guille va buscando la debilidad de la pared para encontrar el mejor recorrido hasta hacerse unos 40m donde monta reunión.



Yago es el siguiente, al que le veo dudar en algunos pasos y tirarme roca como si le hubiera hecho algo ;)

Tengo los pies congelados

No tardo mucho en darme cuenta que tras quitar algunos seguros Yago, me tocaría hacer el mixto todo recto, ya que no quería que la cuerda de 8,1mm rozase en una caída en travesía con los filos que tenía la poca caliza que asomaba entre la blanda nieve.

No tengo ni idea de que grado haría pero el esfuerzo que me requiere cada metro es brutal.
Muchas veces para simplemente subir unos pocos centímetros, me veo obligado a realizar varios movimientos en chirriante placa, con los piolets hundidos en la nieve y gruñendo por el esfuerzo.

Tras 30min de lucha, por fin salgo a un tramo donde puedo pararme a respirar ya cerca de la reunión.



Tras llegar a la reu me doy cuenta que he quemado mi último cartucho en este largo y veo que lo que queda es otro de más mixto, que comienza con un bonito desplome.



Hemos tardado en hacer este largo los tres, 1h y aun nos quedan muchos metros por delante en el que está la chimenea de 80º con pasos de hasta V+.

¿Qué hacemos? – Nos pregunta Guille cuando ya estoy en la estrecha repisa de la reunión

La decisión la tomamos en pocas palabras.

Yo, me veo bien y creo que podemos salir por arriba. – Asegura Guille
¿Pero que hora es? – Pregunta Yago
Las 14:30 - afirma Guille mirando su altímetro.
Demasiado tarde - sentencio yo – Si seguimos sólo habrá un camino, hacia arriba y quedan muchos metros y dificultad para que salgamos de día. Mi voto es que nos bajemos desde aquí.

Yago también vota por el abandono. Dos de tres.

Cambiamos el chip y comenzamos con las labores de descenso.



El material de abandono se decide en cuestión de segundos:
Un cordino de 7mm y 4m, una cinta plana de 4m, dos maillones, dos clavos y un fisu del nº1 como refuerzo.



Primero bajaría Guille, que llevaba más tiempo en la reu, luego Yago y finalmente yo, para luego recoger las cuerdas y meterlas en mi mochila que es más grande, en la mitad del embudo tras el hombro que es hasta donde llegan las cuerdas.



La verticalidad de lo subido, ahora se hace más latente mirando a Yago y Guille bajar.



Lo malo de ser el tercero es que las pisadas en la ahora más blanda nieve es más inestable y con ello me veo obligado a ir más lento para no tener una caída tonta y esnafrarme contra las rocas del fondo.



Paso a paso vamos bajando.

Hasta por fin llegar a las pendientes de acceso.
Mirar atrás y ver el corredor con nuestras huellas le daban un aspecto aun más serio que hacía unas horas cuando no había referencia.



De nuevo las piernas se vuelven a quejar al tener de nuevo volver a los grandes pasos levantando la pierna mucho.



En los descensos es donde ocurren la mayoría de los accidentes, por lo tanto voy con cuidado para que el dolor de las piernas no me hagan dar un mal paso y acabar en el fondo del valle.

Tras un par de horas desde que empezamos a bajar, llegamos a los llanos, donde ya nos despojamos de piolets, crampones, comemos algo, para hacer los últimos metros mucho más relajados.



Cogemos la furgo, el mapa, la guía y buscamos un sitio donde poder hacer algo de hielo…lo malo es que lo más cercano está a dos horas por carreteras secundarias y además no era seguro que estuviera formado, por lo que optamos por Caldas de Luna donde hay mucha roca y una escuela de clásica con vías de unos 130m y hasta un Balneario.



Un masajito y un bañito en termales chavales?

Domingo 18
Esta vez si que dormimos los tres dentro y menos mal, por que esa noche llueve y nos deja un amanecer húmedo y con niebla.



Un paseo para hacer correr la sangre por las piernas.



Vista de la escuela ahora que las nubes se han ido, pero ya es tarde.



Parada para comer “algo” ;)


¡Ay oma que rico!

Y vuelta a Madrid.

Peña Ubiña, sin duda volveré.