1 de agosto de 2016

PRE-CUMPLEAÑOS (EL TRAPECIO, PEÑALARA)

De nuevo volvemos a las frescas alturas de Peñalara donde aun nos quedan vías por escalar gracias a las pocas vistas que he hecho en estos casi veinte años que llevo escalando.

Esta vez, en este día de pre-cumpleaños mío, nos animamos a salir Irma (a quien hacía siglos que no veía), Eloy y Antonio. Número perfecto para escalar.

Lo único que Irma debe regresarse pronto por lo que sin prisa, pero sin pausa comenzamos a escalar las vías que nos diera tiempo a hacer en esta magnífica pared que llaman el Trapecio.


Antonio y Eloy se van al comienzo de la pared. Antonio quiere hacer la “fisura negra” y probar la de la su izquierda.

Esta foto no pertenece a la "fisura negra"

Irma y yo nos vamos a las vías centrales que ninguno de los dos hemos hecho antes y de las que desconocemos grado, protección y recorrido.


¡Me encanta escalar a vista!

Comenzamos por la de la derecha.

Resulta estar más equipada de lo que parece y el grado se concentra en el comienzo, además de una zona de más arriba donde hay un paso peculiar done la roca tiene eco…


Tras esta nos metemos en la de la izquierda, que resulta ser más exigente y difícil de leer, tanto que me salgo por donde no es y me doy un vuelvo que Irma detiene sabiamente sin mayores consecuencias.


Tras este vuelo, corrijo y en mantenido, y desprotegido V+, te va llevando a la reunión de la otra vía.

Una vez la hemos escalado ambos, hacemos cambio de paño y nos vamos a las vías que Antonio y Eloy han dejado libres.

Estas vías ya las había escalado en 2007 y así lo atestigua un post del blog de aquella visita con croquis incluido de todas las vías que hicimos en aquella visita Michel y yo.

Lo cierto es que no las recordaba en absoluto y es que 9 años son muchos años para poder recordarlas.

La primer que hacemos es la de la “fisura negra”. Una preciosa línea que tiene el paso antes de la reunión con mucho aire, imposible de proteger, aunque de paso sencillo.


Tras esta vemos que la hora se le ha echado encima a Irma, por lo que decido darle con la cuerda por arriba a la otra y así no entretenerla mucho más.

Nos despedimos y Eloy se baja con ella, mientras Antonio y yo nos vamos de expedición al Cosaco, para hacer una última incursión nada fructífera.


Después, bajamos raudos a la Venta Marcelino a por el merecido premio (Cerveza + bocadillo de lomo con tomate) y de ahí cada mochuelo a su olivo.

Hay un error en los nombres de las vías: 3 Espigüete y 4 Angelote

2 comentarios:

elmusgonuncaduerme dijo...

La mejor pared de Peñalara y como siempre muy buena reseña (entre la 2 y la 3, estaria la Anapurna o Belgat una via limpia solo con descuelgue dificil de encontrar...).

Aunque tardias !!Felicidades¡¡

Un abrazo.

Vladimir Bustóf de la Sousa dijo...

Una de las mejores diría yo, porque todas las pardes de Peñalara tienen algo bueno ;)

Gracias!

Abrazo!