TRES PUNTAS INACCESIBLES DE TERUEL, DE LA GUÍA “100 PUNTAS INACCESIBLES DE TERUEL”

Hace unas semanas me llegó la publicada recientemente guía de escalada 100 Puntas Inaccesibles de Teruel. Una de esas que es mucho más que una simple guía de escalada.

En ella se cuenta una bonita historia de amistad y lucha, un sueño desde su comienzo hasta su largo fin que se desarrolla durante años.
No está hecha por famosos escaladores. Son dos jóvenes sencillos, Javier Magallón y Luis Torrijo, que deciden hacer realidad un sueño, de esos que muchos llaman “locos”, que casi todos tenemos y no llevamos a cabo nunca.

Sobre la guía, aparte de algunos detalles técnicos, como el llamar “abrir vía” a ir de primero y decir “1º apertura” cuando en realidad solo se puede abrir una vía una vez, por lo demás es una guía muy recomendable que merece la pena primero leer y luego decidir qué escalar.

Se trata de una cuidada selección de 100 vías. 50 de ellas son puntas más grandes (2 largos máximo) y las otras 50 más pequeñas (1 largo), con reseñas de cada punta, croquis en foto, mapas, coordendas, historia de la escalada, lugares cercanos de interés, etc.

Resumiendo mucho, una guía estupenda para conocer Teruel buscando estas peculiares formaciones rocosas, en la que escalarlas, se convierte siempre en una pequeña aventura.

Lunes día 19
Tengo un par de días libres que coinciden con los de Yago y decidimos hacernos un viaje a lo más cercano que tenemos de Teruel, desde Madrid, para escalar tres puntas de la guía.
No son las mejores puntas inaccesibles de la guía, pero logísticamente nos cuadran. Dos de las importantes y una de las que pequeñas.

La primera que encontramos en nuestro camino es la que llaman El Niño.
Para llegar a ella nos desplazamos al pequeño pueblo de El Cuervo.

Siguiendo las precisas indicaciones de la guía encontramos la aguja sin problemas.

Es lunes y poca gente nos encontramos en la zona. Tan solo nos cruzamos con dos apicultores jubilados que nos amenizan el ascenso contándonos historias para no dormir sobre un antiguo método de caza de conejos y águilas con palos en la boca…
También probamos los maduros higos que nos ofrecen comiéndolos gustosos.

Se trata de una modesta punta pero con fotogénicas vistas.

Se escala su cara Norte, aunque se pueden apreciar posibilidades en otras caras. No obstante, la roca es conglomerado y se fractura con facilidad con tan solo cargar el peso.

La suerte decide que Yago sea quien la haga de primero.

Con ello además se lleva varias fotos muy chulas.

Que opta claramente a salir en el próximo calendario de 2017 del blog, como podéis imaginar.

Como es habitual en el blog, el croquis del recorrido hecho.

Y aquí un corto víde de 5s de tiemelapse de la cima.

Tras esta, rapelando unos 25m, desde un solo parabolt que hay en la cima, casi corriendo nos vamos al pueblo de Tormón.

Allí tenemos otra de las puntas. Esta vez de las importantes.

Aunque tan solo tiene un largo con una trepada anterior.

Cuando llegamos al pueblo vemos que tiene más vida que el anterior y terminamos siendo el espectáculo ya que esta punta que llaman en la guía El Castillo es bien visible desde casi cualquier sitio del pueblo.

También nos sorprende que vemos unas marcas rojas, en una de las paredes, colocadas en diferentes puntos de la aguja.

Luego nos enteraríamos que son para poder saber si se está moviendo y cuanto mediante fotografías comparativas con esos puntos.

Siguiendo de nuevo las indicaciones callejeamos y subimos hasta la aguja.

Nos sorprende la trepada que hay que hacer para llegar y dudamos de que luego podamos destreparlo con seguridad.

Luego descubriríamos que es mejor subir por el Sur, antes de llegar al deposito de agua que se ve en la foto de abajo, desde una calle aledaña, subiendo por unas sencillas terrazas mucho más estables que donde indica la guía.

Ya en la base entendemos lo que decía de llevar chapas…literalmente no tiene chapas y solo asoman los espárragos de varios expansivos.

No llevamos chapas ni tuercas por lo que si queremos bajar con seguridad hay que llegar al descuelgue si o si.

Como decía antes una pequeña aventura en cada aguja.

Divisamos la reunión sobre un arbusto que lo rodea un cordino blanco, con una manguera.

Esta vez me toca a mi ir de primero…

Tras un vistazo veo claramente por dónde podía subir. Una fisura que parecía bastante reciente en el lado izquierdo del muro.

Desconozco si alguien ha subido por ahí con anterioridad, pero nada más comenzar me llevo buenas piedras en las manos y en los pies.

De hecho cada paso es una limpieza.
Por suerte el aseguramiento con friends es sencillo y bastante fiable…para ser conglomerado claro.

Luego travesía a la derecha a pelo y reunión colgada.

Llevo un cordino de abandono, por lo que sin dudarlo laceo el arbusto con él y aseguro a Yago.

En poco rato llega a la incómoda reunión.

Los dos ya colgados, decidimos rapelar hacia el Sur donde veremos las terrazas de acceso más sencillas para llegar a la placa.

Croquis de la vía "nueva".

Y el vídeo timelapse de 5s de duración de regalo.

La foto de abajo está hecha desde la última terraza por la que es más recomendable acceder.

La noche se cierne sobre Teruel y decidimos dar por terminado el día, nos sin antes tomarnos unas cervezas en el moderno bar del pueblo que regenta una chica.

Tras estas y ver un poco lo que teníamos para mañana, nos vamos a buscar un lugar para vivaquear.

Perdona –le preguntamos a la chica – ¿no sabrás un buen sitio por aquí cerca para vivaquear?

Claro que si – nos dice – la tejería que la tenéis aquí al lado. Tiene agua y luz. Está a tan solo un par de kilómetros bajando.

El lugar es magnífico y además está súper limpio.

Aprovechamos para cenar en condiciones y vernos mientras un documental de escalada (como no) que he traído en la tablet.

Martes día 20
De nuevo día espectacular en Teruel y ahora con luz el sitio se inmejorable.

Agua corriente.

Espacioso para mucha gente.

Un cartel contando la historia de la zona.

Lo que no hemos visto es lo de la luz que decía la chica del bar aunque hay un panel solar que debe estar enchufado a algo que necesita energía y que no hemos visto.

Tras el copioso desayuno como nada la tradición, nos vamos al pueblo de Tramacastiel donde tenemos el último objetivo del viaje.

Hemos dejado la más difícil y larga para la última.

La gradúan de 6a y tiene unos 22m además de una aproximación más larga.

Nosotros tardamos 35min.

Tras este llegamos a su base que hay que coger por arriba e ir asomándose para ver la punta en cuestión que llaman La Horca Vieja…adivinad por qué.

Una vez en la aguja hay que pasar por un pasillo interno que tiene que da a la cara Sur por donde va la vía.

De nuevo sería yo el encargado de ir de primero.

El comienzo sin duda es lo más difícil si hablamos de grado.

Decido salir desde el mismo pasillo y luego darme un atlético paso sobre romos y pies malos que “limpio” previamente, hasta encaramarse en la primera repisa.

La sección siguiente hasta la única chapa de la vía es un conglomerado que se desmenuza con tan solo mirarlo.

Me toca hacer una buena limpia para ir con cierta seguridad.

Luego protejo con tres friends en la única que fisura que hay.

Luego me lanzo al resto de metros que por suerte son más compactos, aunque improtegibles, tras la chapa.

La reunión es un parabolt con dos maillones enlazados.

Refuerzo con un Alien amarillo y aseguro a Yago que sube raudo a mi lado.

Foto cima.

Croquis del recorrido hecho.

Y el último timelapse de 6s de la cima.

Ahora tan solo queda el rappel y la vuelta al coche.

Como decía al comienzo, una buena manera que de conocer las profundidades de Teruel escalando.