DISTRACCIÓN (EL BOALO)

A veces pienso que la Sra Meteo tiene vida propia y muy mala uva. Pero ya he comprobado en otras ocasiones que si se sabe hacer, se pueden conseguir nuestros objetivos: Sólo hay que saber distraerla.

Todos teníamos planes para esta SS en mi caso era cuidar de quién ahora ocupa mis sueños y escalar algo. Pero como todos los años, las previsiones eran de lluvia y los planes escalatriles estaban en el aire.

Me conformaba con solo deportiva, para así al menos quitarme de la chepa el mono que ha decidido agarrase, aprovechando que no llevo mochila últimamente a mis espaldas.

El día elegido el sábado en la mañana.
Los componentes, Yago, Antonio, Miguel y…eso es ;)
El lugar, El Boalo.
La actividad, escalar, pero eso solo lo sabemos nosotros 4 y no lo decimos el alto para que no nos oiga la Sra.

Pero para que sea efectiva una distracción tiene que ser creíble y elaborada, así que cogemos los paraguas, las chupas para el agua y dejamos las mochilas, llenas de material de escalada, en el maletero, como si no hubiera nada, saliendo camino hacia arriba a ver unas vías que conoce Miguel.

Tralaralarito, doy un paseito…

La lluvia se ceba con nosotros y acompaña todo el camino, que realizamos mirando las diferentes zonas que nos va enseñado Miguel, a cual más interesante, con futuros prometedores.

Estamos en estas cuando nos damos cuenta de que la Sra Meteo está distraída con unos chavales que van en bici, cuesta arriba, hacia las zetas de la Pedriza.
Miramos al cielo y vemos que sin querer se ha dejado una ventana abierta y se le escapan las nubes por ella.

Tralaralarero solo de pateo…

Nos damos la vuelta y bajamos sin hacer ruido, mientras sonreímos al ver que se le ha olvidado cerrarla y cada vez más nubes salen disparadas por el hueco, dejando un cielo azul que deja pasar el deseado sol de primavera con una corriente perfecta para que seque la roca durante nuestra bajada.

Miguel y Antonio, no pueden evitarlo y los últimos metros los hacen rápido.
Yago y yo nos quedamos rezagados por si la Sr de repente gira la cabeza y nos ve volver demasiado rápido a los coches.

Probamos en el Molinillo?

La orientación y la cantidad de lluvia caída nos hacen dudar, pero es un sitio asequible y cercano.

Pero efectivamente está “húmedo”...

Un poco desesperados al ver que el tiempo pasaba y no encontramos nada seco, decidimos tirar a unas placas de orientación Sur, que Miguel sabe son difíciles.
No estamos para elegir.

Esta vez la suerte nos sonríe con vraias vías totalmente secas. Sin dilación, sacamos el material y nos ponemos a darle caña, guiados por Miguel.

Le oigo llamarla Placa de los Porrones, pero no estoy seguro.

La primera de la izquierda para calentar (V+) es un buen entrante para ver de que va a aquí la roca.
La siguiente es mucho más dura. Entre Miguel y yo le damos sobre el 6c, pero ninguno conseguimos sacarla entera sin caernos. Muy fina al comienzo.
Para acabar, hacemos un 6b que hay a la derecha, con un recorrido muy bonito que te obliga a colocarte.

¡Chúpate esa Meteo! ¡Hemos escalado! :D

Luego, contentos y despreocupados porque tome represalias, nos vamos a la barcacoa de Ca Cristina, a recuperar lo perdido, encontrándonos con antiguos que cambian de vida y conociendo a nuevos, que no dejan indiferentes a ninguno.