ARAÑAZOS EN LA ROCA (RISCO DE "LA FLECHA" Y EL MOLINILLO, EL BOALO)

Los dos puentes seguidos del año y ninguno de ellos hemos librado de lluvia.

Aun así las ansias pueden y Miguel ayuda a decidirnos al contarnos que tiene un trato con la Sra M. para el día 2 de Mayo: Nos dejará trepar hasta que terminemos de escalar.

Veamos si cumple el trato.

Llevaba soñando con un par de arañazos en la roca que me había mostrado Miguel la semana anterior, en un risco del Boalo con forma de flecha del que desconocemos nombre y equipadores, pero que desde lejos se adivinan divertidas y de empotre.

Pero antes tenemos que calentar y que mejor que hacerlo en dos de las mejores líneas de la placa del Molinillo?

La noche anterior había estado descargando de lo lindo, por lo que las expectativas son bastante baja dada la orientación y reciente lluvia, por lo que nos acercamos con esperanza.

A pesar de que las primeras líneas están poco más o menos que el finde anterior, tras volver a sus pies de vía descubrimos que están bastante secas, aunque su aspecto es más bien húmedo.

Miguel nos demuestra que lo están, metiéndose en la que queda más a la izquierda, siendo de grado V+, por la entrada y algún paso aislado más arriba.

La vía tiene 30m!

Sin mucha dilación y mirando a las nubes que nos rodean como si nos protegiera una extraña cúpula, nos metemos en la que es una preciosidad de recorrido en su grado (6a), que no deja indiferentes al que la escala.

Lo mejor sin duda la travesía tras la 3ª chapa.

Con cuerda de 70m hay que hacer un par de rápeles para poder llegar al suelo, usando uno intermedio que hay a la derecha, a mitad de vía.

Soy el penúltimo en hacerla, tras Miguel y Antonio y cuando estoy en plena translación a izquierdas comienza a chispear, posible agua traída por el viento y que a Manolo hace dudar de si la disfrutará.

Esas nubes no vienen para acá.

La cosa no está muy clara, ya que los truenos cada vez suena más cerca, pero en nuestro privilegiado objetivo tan solo nos llegan esos restos viajados por el viento, que apenas consiguen acariciar la roca.

Ya bajo “La Flecha”, valoramos como acceder a ella.

Por unanimidad planeamos subir por detrás, por su lado izquierdo y luego rapelar a la base dejando una cuerda instalada por si hay que salir por patas de allí.

No he llegado al suelo cuando Miguel ya casi tiene calzados los gatos para probar la fina fisura de dedos de la derecha.

Se la sube ligero demostrando sus años de experiencia.

Tras él se anima Manolo y Antonio

Mientras, para aprovechar el tiempo, decido darle de primero a la fiusra de la
izquierda, que parece de manos/puño.

La entrada sin duda lo más duro.
Le siguen unos pocos empotres y descansos perfectos para pararse a elegir cacharro, por lo que termina siendo un V+ disfrutón, con el único inconveniente de está sucia por falta de uso.

Aprovecho ya que estoy arriba para quedarme colgado de la reu y sacar algunas fotos de la escalada de Miguel.

Tras ello, me animan a darle un tiendo de segundo a la de la derecha, para ver como va.
Resulta ser una bonita vía que requiere de algún malabarismo para ahorrar fuerzas en la especial entrada y luego un tramo de continuidad de esos de no pararse hasta estar cómodo. Le damos sobre el 6a.

Para finalizar, Manolo también prueba el V+.

Luego, Antonio le da de nuevo al V+ para ya salir por arriba hacia las mochilas.

Estamos en estas cuando escuchamos un trueno que nos alerta de que el contrato está llegando a su fin y vamos claramente que tenemos que salir de allí cuanto antes si no queremos pillar la tormenta eléctrica en su apogeo. Entonces, vemos que a la derecha del risco hay una canal que puede servir de escape para llegar arriba.

Miguel es el primero en subirla.

Luego voy yo y seguidamente Manolo. Ambos nos sorprendemos de los espectaculares pasos de diedro que hay que hacer para subir sobre terreno musgoso.
El toque final! :D

Placa de los Porrones

Ya en las mochilas toca sacar los chubasqueros para luego llegar al coche.

La Sra, ha cumplido. Haremos nuevos negocios con ella sin duda.