LIBRO, UNA VIDA EN LA VERTICAL

En mi biblioteca de montaña, abundan más guías y manuales que literatura o biografías, pero desde hacía tiempo, quería saber sobre la vida y milagros de este escalador.
Una vida en la Vertical.

Terminé el libro hace unos días y he decidido criticarlo.

En primer lugar, decir que, es evidente que, si se trata de una biografía, lo mejor es que sea auto, ya que nadie podrá plasmar mejor que tú lo que sentiste, pensaste o quisiste decir con una determinada acción, decisión o comentario. Este hecho, ya lo hace saber su autor, Tilmann Hepp, en las primeras líneas.
Quizá sea ese dato importante el que deje al lector con una sensación de impersonalidad y que no termina de reflejar la forma de pensar de este escalador.

Tienes la sensación de estar perdiéndote algo, como cuando vas a ver una peli subtitulada, que por más que lo intentas no puedes leer y ver la imagen a la vez.

Quizá los míticos que dieron una vuelta de tuerca en esto del trepar, debieran plantearse hacer una autobiografía en vida o al menos llevar algún tipo de diario, pensando en que se publique sin que nadie pueda interpretar su vida de forma erronea.

A partir de este detalle, se deducen varias cosas, o la menos a mi me ha pasado, después de leer proezas como las de hacer dominadas con los meñiques.
Está claro que Güllich, tenía unos tendones que no eran normales. Eso no se entrena, se tiene y la naturaleza le brindó esa envidiable resistencia.
Otra de las cosas que deduces es que, a pesar repetir en varias entrevistas, no importarle perder en las competiciones, da la sensación de que sí.
También se asegura que jamás tomó drogas...el término droga es muy amplio y Wolfgang era adicto a la cafeína; una droga, legal.

El libro está escrito de forma muy general y pasa por encima muchas cosas que, a los lectores les interesaría saber. Cosas como por ejemplo si escaló en España, si probó alguna ruta de adherencia Pedricera, si se peleó con algún Galayo abulense, si dudó en Riglos al tirar de una bolo como todo hijo de vecino, etc, etc.

Una cosa interesante, es la cita que hace sobre un libro escrito por él y el autor de la biografía(¡Qué casualidad!) y algunos vídeos que grabó.
El libro se titula La Escalada Deportiva( un título super original) le tengo pendiente una hojeada para ver si es interesante de adquirir.

De los vídeos he conseguido varios (conmemorativos) de después de su muerte, pero sólo uno (con bastante mala calidad) en el que aparece escalando la mitica Realidad Aparte, asegurado por su amigo Kurt Albert, que la escala de una forma... diferente. En dicho vídeo también se le ve encadenado el bloque del Campo4, El Rayo Que No Cesa, mientras que Kurt, no lo consigue.

Es interesante saber que en el último año de su vida, trabajó en la peli Máximo Riesgo, en la que hacía de doble de Silvester Stallone.

Esta peli se estrenó en 1993, pocos meses después del accidente de coche que le quitó la vida, es decir que se podría considerar su última obra póstuma.

También hacía poco tiempo que había encadenado la que tardó 15 años en repetirse Action Direkte, el primer 9a de la historia basado en la dificultad y no en el número de metros como se intenta hacer ahora para proponer 9º.

Estos últimos datos, te hacen preguntarte hasta donde hubiera llegado el grado, si Wolfgang hubiera envejecido con los años.
Estoy casi seguro que ahora ya estriamos hablando del 10º, a pesar de que como entonces, se dudaba de que, Action Direkte, llegase siquiera a 8c.

No llegaremos a saberlo con seguridad, pero lo que está claro, es que Wolgfang Güllich, podría compararse, en el mundo de la escalada deportiva, a Mozart en el de la música.

Wolfgang Güllich, un ejemplo a seguir.